Santo Domingo.- Con la solidaridad del Gobierno y representantes de los diferentes sectores de la vida nacional, la familia Mejía Gómez dio el último adiós a la exprimera dama de la República, Doña Rosa Gómez de Mejía, quien falleció el pasado lunes a causa de una infarto.
Al hablar en nombre de la familia, los hijos de la expareja presidencial prometieron no dejar solo a su padre, el expresidente Hipólito Mejía, luego de la partida de su esposa.
Al finalizar una misa de cuerpo presente oficiada en presencia del presidente de la República, Luis Abinader, y la vicepresidenta Raquel Peña, la señora Lissa Mejía Gómez sostuvo que Doña Rosa le deja la fe, la responsabilidad y el valor por las amistades que cultivó.
El presidente Luis Abinader rindió guardia de honor ante el ataúd de doña Rosa Gómez de Mejía, por aproximadamente siete minutos, junto a la primera dama Raquel Arbaje, la vicepresidenta Raquel Peña y el ministro Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza.
En una ceremonia privada para los familiares más cercanos , la exprimera dama fue sepultada en una área que escogió, especialmente, debajo de un árbol en el Cementerio Jardín Memorial, hace exactamente una semana.
Por el fallecimiento de Doña Rosa el presidente de la República, declaró tres días de duelo nacional que iniciaron el pasado martes y concluyen este jueves.